Michael Jordan, 1995

Estaba perdido, no me encontraba a mí mismo, no me conocía. Fue lo peor. Sabía que algo iba mal en mi vida, empecé a darme cuenta de que quizás me había equivocado pero ni siquiera me daba cuenta de que estaba perdido.
Durante mucho tiempo todo el mundo me veía como un objeto, como un producto, y lo que es peor, yo estaba empezando a verme de la misma manera.
Me estaba convirtiendo en un objeto para mí mismo...entonces me dí cuenta de que lo que quería hacer era disfrutar de cada minuto de mi vida, es decir, jugar partidos de baloncesto, que es lo que de verdad me gusta. Nunca me senté a pensar sobre ello antes porque todo iba demasiado rápido. Pero al final descubrí mi realidad: Soy un jugador de baloncesto, eso es todo lo que soy y para lo que sirvo. Cuando me dí cuenta de eso fue como volver a la vida y recuperar la felicidad. Porque nada más importa...
Etiquetas: Especial Navidad
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home